AMLO, Sheinbaum y la trituración del poder mediático
¿Claudia Sheinbaum seguirá la misma política con los medios de comunicación que Andrés Manuel López Obrador?
El expresidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) no sólo transformó el estilo de la comunicación del Gobierno Federal a través de las conferencias de prensa “mañaneras”, sino que también trituró la concentración de gastos de publicidad oficial estimulando la creación de nuevos medios de comunicación burdamente zalameros que, a su vez, le ayudaron a pulverizar el poder mediático y la presión que han ejercido en otros tiempos.
Tal como indica la organización defensora de la libertad de expresión Artículo 19, el presupuesto de publicidad oficial ha sido utilizado históricamente para influir en la línea editorial de los medios de comunicación. Por lo que el establecimiento de reglas, leyes y reglamentos claros para su reparto ayudaría a una distribución justa que evitaría la “venta” de la línea editorial.
La distinción en el manejo presupuestal de AMLO comparado con el sexenio de Peña Nieto fue clara: el gasto en publicidad oficial durante el sexenio de López Obrador, de 2019 a 2023, fue de 14 mil 500 millones de pesos, una diferencia de 78.70% menos con respecto al sexenio de Peña Nieto.
Además, aunque 921 medios de comunicación recibieron los recursos gubernamentales entre 2019 y 2023, solamente 10 concentraron el 48.57% del presupuesto:
- Televisa
- La Jornada
- T.V. Azteca
- Medios Masivos Mexicanos
- Grupo Imagen
- Grupo Formula
- Organización Editorial Acuario
- Agencia Digital
- Milenio Diario
- Estudios Churubusco Azteca
Artículo 19 explica que la concentración del dinero en pocos medios afecta a la pluralidad informativa y la “objetividad” de su información, aunque omite indicar que la dependencia de un medio a la publicidad oficial es responsabilidad total del medio, lo cual también afecta la pluralidad y la línea editorial.
De hecho, una de las formas más claras de detectar a un medio que goza de la publicidad oficial es su información sesgada a favor de los gobiernos y contrariamente un medio que acaba de perder esas dádivas crítica mordazmente al gobierno en turno; los ejemplos abundan a nivel local y nacional.
Por ello, diversas empresas mediáticas o medios alternativos han optado por dividir sus ingresos en varias fuentes para mantener sus posibilidades de sobrevivencia y no sesgar su línea editorial, como publicidad oficial, donaciones voluntarias y apoyos de asociaciones civiles u organismos internacionales; de hecho transparentan sus fuentes de dinero o la comunican en su Código de Ética.
El desprestigio de las noticias
El juego presupuestal y la reacción de los medios ha provocado la pérdida de legitimidad y presitgio de quienes producen noticias. Un estudio del Reuters Institute expone que el 35% de los encuestados tiene confianza en las noticias (cuando en 2017 era 49%) y el consumo de prensa escrita y en la televisión es cada vez menos importante, en contraste con las redes sociales que son cada vez más utilizadas para informarse.
El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) registra que sólo 17.8% de la población alfabeta lee periódicos (cuando en 2015 era 49.4%) y 21.7% lee revistas (cuando en 2015 era 47.2%), un asunto que va más allá de la preferencia por la digitalización y el internet para consultar información.
Según el Inegi, el internet se usó con más frecuencia para comunicarse (93.3%), para acceder a redes sociales (91.5%) y para entretenimiento (88.1%). Mientras que leer periódicos, revistas o libros disminuyó de 39.9 a 36.8%, entre 2022 y 2023. Por su parte, la Asociación de Internet MX apunta que el 79% de los usuarios de redes sociales acceden a ellas para mantenerse informado.
Lo anterior sirve para comprobar sobre cómo AMLO hizo un tiro de tres bandas:
- 1) Redujo el presupuesto en publicidad oficial a medios tradicionales y masivos para trasladarlo a otros ámbitos más trascendentes, con lo cual recibió muchos ataques mediáticos que le sirvieron para victimizarse y abonar a su narrativa de “gobierno bueno” y “adversarios malos”.
- 2) Concedió recursos a una mayor cantidad de nuevos medios que necesitan menos dinero para sobrevivir, por sus características meramente, digitales que apoyan sin cuestionamiento a su gobierno.
- 3) Generó una duda en la credibilidad de los medios, por lo que cada nuevo ataque es inmediatamente cuestionado.
Particularmente incluyó nuevos perfiles de “periodistas” afines al poder y que en cada mañanera buscaban la manera de sobresalir, como Carlos Pozos Soto, conocido como “Lord Molécula”, o representantes de medios como Sin Línea, Contralínea o El Chapucero, que aportaron en gran parte al desprestigio de otros medios de comunicación. La percepción de que “todos son vendidos” o “todos son iguales” se ha generalizado, cuando en realidad, no es así.
Los medios “preferidos” por AMLO son sus beneficiados presupuestales. Una investigación publicada por Animal Político sobre la Organización Editorial Acuario documentó que, de recibir 150 mil pesos en el último año de la presidencia de Enrique Peña Nieto, ahora son parte del Top 10 de medios con más presupuesto oficial.
Al comienzo de la presidencia de López Obrador, en 2019, su partida subió a 64 millones de pesos, y desde entonces -y hasta 2022- no recibió menos de 70 millones al año. Esta empresa es propiedad de Miguel Cantón Zetina, hermano del diputado federal tabasqueño Óscar Cantón Zetina.
Atrás quedaron los días en que los medios de comunicación representaban un verdadero contrapoder, por lo menos, al poder procedente del Estado o como una entidad que elevaba a la agenda pública los problemas más relevantes de la sociedad. Su crisis de credibilidad y de sus planes de negocios dejaron el entorno ideal para que una intervención estratégica del Estado (en este caso AMLO) que terminara por pulverizar su influencia.
La actual presidenta Claudia Sheinbaum seguirá con las mañaneras, aunque tendrá como mano derecha de su comunicación a un nuevo perfil: Paulina Silva, quien será clave para definir si la trituradora de credibilidad de medios continuará o dará un giro.
